LEY DE ALQUILERES: EL OFICIALISMO CAMBIA EL IMPUESTO A LA VIVIENDA VACÍA POR INCENTIVOS FISCALES PARA PROPIETARIOS

Cumplido el plazo de un mes para debatir una posible modificación a la ley de alquileres e impulsar un dictamen, el Frente de Todos impulsará esta tarde en la Comisión de Legislación General de la Cámara de Diputados un proyecto de reforma de la ley de alquileres que incorpora incentivos fiscales para propietarios e inquilinos con el fin de mejorar la oferta de viviendas, manteniendo los ejes centrales de la norma aprobada en 2020, informaron fuentes parlamentarias.

La ley sancionada en 2020 a instancias del bloque de Cambiemos extendió la vigencia de los contratos de 2 a 3 años y fijó un indicador anual de ajuste de valores basado en un promedio de la inflación y los salarios, que ahora son cuestionados por inmobiliarias y propietarios, y que son defendidas por las principales asociaciones de inquilinos.

El objetivo principal es encontrar soluciones al desabastecimiento del mercado locativo. De acuerdo al informe mensual que realiza el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO), durante los primeros cuatro meses de 2022, la cantidad de departamentos ofertados para alquiler cayó en promedio 20% por debajo del valor del mismo período del año anterior.

Fuentes del oficialismo señalaron que, tras analizar las diferentes posturas, decidieron “darle más tiempo a la ley” y encarar las reformas con la mirada puesta en los incentivos ya que el principal problema es la falta de oferta.

En ese contexto, tendrán en cuenta algunos puntos propuestos que propone beneficios para los monotributistas y para los propietarios, con el objetivo de incrementar la cantidad de inmuebles para alquiler.

Sin embargo, quedaría descartado por ahora el polémico impuesto a la vivienda ociosa.

Los artículos que frenaron un posible consenso: Pese a que hoy se cumple el plazo de 30 días para que la Comisión integrada por legisladores del oficialismo y la oposición llegara a un dictamen parlamentario respecto a las modificaciones de la ley 27.551, el tratamiento se trabó por las diferencias entre las cámaras inmobiliarias y las agrupaciones de inquilinos.

Respecto a los artículos que generan más desencuentros, está el tema de la duración de los contratos - que en la actualidad es de tres años - y la actualización de precios anuales a partir de un índice que combina la inflación y el crecimiento de los salarios.

Fuente: LA NACIÓN Propiedades